La Federación Económica de Santa Cruz (FESC) mostró su satisfacción por el acercamiento entre los gobiernos Nacional y Provincial para tratar la crisis que surgió en la obra de las represas sobre el río Santa Cruz ante la detención del proyecto. Además se hizo votos para que prosigan las reuniones con el objetivo de que la megaobra se concrete, y genere los puestos laborales anunciados y los beneficios para los santacruceños.
También se hizo hincapié en la coyuntura que atraviesan los proveedores de la Unión Transitoria de Empresas (UTE) “Represas Patagonia”, quienes no han podido cobrar los insumos y servicios prestados ante la incertidumbre que cayó la obra por una medida de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
“Celebramos que la Provincia, a través del ministro de Economía, Juan Donnini, y la Nación, con el titular del Ministerio de Energía, Juan José Aranguren, se pudieran reunir ante esta crisis que afronta el proyecto hidroeléctrico, que ha puesto en peligro 328 puestos de trabajo y a su vez la incertidumbre de los proveedores que no han podido cobrar los servicios prestados e insumos provistos a la UTE que esta a cargo de la megaobra. Por ende y ante esta circunstancia, destacamos los avances entre la Nación y la Provincia para que no siga en riesgo el proyecto, y se prospere en lo que respecta a lo ambiental, para que así se pueda proseguir con el inicio de la obra que es tan importante para la economía de la región, y una vez concretada, será el legado energético tan anhelado por nuestra provincia”, dijo Guillermo Polke, presidente de la FESC.
En este sentido, remarcó que aguardan que se concrete una mesa de diálogo entre todos los sectores implicados en la obra, para así en conjunto poder afrontar las dificultades que han surgido con el proyecto. “Esperamos nuevas reuniones, y donde está Federación Económica volverá a reiterar la delicada situación que se encuentran los proveedores de la UTE, que muchos realizaron una millonaria inversión para poder estar a la altura que demanda la obra, y hoy deben afrontar los compromisos de la inversión y para colmo no pueden cobrar los servicios e insumos facilitados. Pero a su vez, estamos dispuestos junto a las autoridades a seguir defendiendo las represas, porque estamos convencidos de que el proyecto es viable y que dejará en Santa Cruz muchos beneficios para las generaciones venideras”.