Marcia Desurko, mamá de un estudiante de la Escuela 29 de Caleta Olivia, denunció diversas problemáticas en la institución educativa que han afectado la salud y seguridad de los niños desde hace semanas. En una entrevista con Voces y Apuntes, Desurko detalló los incidentes y reclamos realizados por los padres.

“Desde el 27 de marzo, nosotros presentamos la primera nota como papás autoconvocados, principalmente por la calefacción y otras problemáticas de la escuela, como la conformación fraudulenta de la cooperadora y el maltrato a los niños, con actas hacia docentes y directivos”, afirmó Desurko. “La calefacción funcionaba mal y muchos niños presentaban síntomas como dolores de cabeza. En particular, mi hijo, que tiene asma crónica, volvía ahogado y con mucho malestar de la escuela”.

Desurko también mencionó que estas quejas se hicieron extensivas a la Supervisión de Escuelas, sin resultados concretos. “Nos dimos cuenta de que en todos los turnos los niños manifestaban lo mismo: mucho calor en el gimnasio y mucho frío en otros sectores. Hicimos el reclamo, fuimos a Supervisión de Escuelas y tuvimos una reunión, pero no llegamos a nada”.

Además de la calefacción, se denunciaron otros incidentes graves. “Hay otros dos temas terribles en la escuela: uno de un niño que estaba quebrado y la mamá lo encontró así cuando lo fue a buscar, después de más de 40 minutos sin que llamaran al hospital. Otro niño, que tiene operaciones en la pierna, debe subir escaleras. Hay muchas situaciones de vulnerabilidad en el colegio y por eso volvemos a reclamar”.

La situación se agravó hace dos semanas cuando el hijo de Desurko sufrió un ataque de asma en la escuela. “Cuando lo fuimos a buscar, en algunos sectores de la escuela se sentía un olor a quemado. Entre varios padres decidimos hacer la denuncia en Distrigas. Los directivos no nos dejaban entrar a la escuela, pero cuando finalmente lo logramos, la gente de Distrigas pudo corroborar que la calefacción estaba en mal estado, algunos vidrios de calfactores estaban rotos, las calderas y calefactores no estaban en condiciones óptimas, el ambiente se sentía muy pesado y había presencia de monóxido de carbono”.

Las denuncias de los padres llevaron a la suspensión total de clases en la escuela. “El lunes se suspendieron las clases por completo porque una caldera se habría roto. Estamos en una situación crítica y ahora hasta nuevo aviso no hay clases”, concluyó Desurko.

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