El comisario Mayor Cristian Cancinos, al frente del operativo de seguridad durante los carnavales 2025, detalló las medidas implementadas para asegurar el éxito del evento. Con un despliegue de 65 efectivos policiales de distintas unidades, incluyendo la Guardia de Infantería y el Grupo de Operaciones Motorizadas, el operativo priorizó la prevención y coordinación interinstitucional.

«Desde la Dirección Regional Norte planificamos cada detalle. Sectorizamos el evento en zonas estratégicas para cubrir todos los frentes: el complejo municipal, la Costanera y los accesos principales. Cada equipo tiene roles definidos, desde el control de multitudes hasta la vigilancia perimetral», explicó Cancinos.

El comisario Cancinos, destacó que además de las fuerzas policiales, se realizaron reuniones previas con bomberos, Defensa Civil y autoridades municipales para alinear los protocolos de seguridad. «Trabajamos en conjunto desde la semana previa. La clave fue mapear riesgos y asignar recursos para evitar incidentes», añadió.

Sobre el comportamiento del público, Cancinos resaltó: «Hasta el momento, el desarrollo es normal. Las familias están disfrutando con responsabilidad, pero es fundamental recordar las pautas básicas: evitar dejar aerosoles de espumas en el suelo y usar los cestos dispuestos por el municipio”.

El comisario también mencionó, que «hay una alta concentración de autos en las inmediaciones”. Por lo que enfatizó el control de los vehículos para evitar inconvenientes, no solo por autos mal estacionados que dificulten el acceso de ambulancias o bomberos, sino para la prevención de ilícitos, sostuvo

Por otro lado, Jorge Rodríguez, bombero voluntario, reforzó el enfoque preventivo: «Estamos posicionados cerca de la zona de peñas y fogones.

Nuestra labor es actuar en segundos ante cualquier emergencia, aunque afortunadamente no ha sido necesario».

Cancinos cerró con una invitación a la comunidad para «disfrutar del espectáculo de nuestros carnavales».Por último, el operativo, que combina vigilancia policial, control de accesos y respuesta rápida de emergencias, refleja un esfuerzo interinstitucional para asegurar que los carnavales se vivan con alegría y responsabilidad.