Caleta Olivia conmocionada: Franco Nahuel Marcial lucha por su vida tras recibir un disparo en la cabeza

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El joven de 18 años permanece en terapia intensiva con un diagnóstico de “traumatismo craneoencefálico grave” y pronóstico reservado. La policía detuvo a un sospechoso y continúa la búsqueda de un segundo involucrado. La comunidad mantiene cadenas de oración mientras crece la preocupación por la violencia en la ciudad.

La comunidad de Caleta Olivia vive horas de profunda angustia y consternación por el estado de salud de Franco Nahuel Marcial, el joven de 18 años que fue baleado en la cabeza durante la noche del domingo en el barrio 17 de Octubre, en la intersección de las calles Quijote Novelia y Prefectura Naval.

Según un parte médico oficial difundido ayer martes, Marcial presenta un traumatismo craneoencefálico grave producto de una herida transfixiante por proyectil de arma de fuego. Se encuentra internado en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Hospital Zonal con un puntaje de Glasgow 3, el más bajo en la escala que mide el nivel de conciencia, lo que refleja un coma profundo.

Los especialistas calificaron su estado como “extremadamente reservado” y señalaron que la mortalidad en cuadros similares supera el 90%, advirtiendo además una “alta probabilidad de lesión difusa incompatible con recuperación funcional”. En caso de sobrevivir, las secuelas neurológicas podrían ser graves o permanentes.

En el marco de la investigación, la policía detuvo a un joven de apellido Pratt, quien se encontraba prófugo y se entregó en Puerto San Julián. Las autoridades continúan con la búsqueda de un segundo sospechoso, mientras se intenta esclarecer las circunstancias del ataque.

El violento episodio ocurrió alrededor de las 21:30 del domingo, cuando vecinos alertaron al 911 por detonaciones en la zona. Si bien en un primer momento no se hallaron rastros, minutos después una mujer informó sobre la presencia de un joven herido de gravedad.

La noticia provocó una fuerte conmoción social. En la noche del martes, familiares y amigos de Franco se congregaron en el exterior del Hospital Zonal y luego marcharon hacia El Gorosito y la Comisaría Segunda, donde se registraron algunos incidentes y hechos de vandalismo contra la dependencia policial.

Mientras la investigación avanza, la comunidad caletense mantiene cadenas de oración y ruega por la recuperación del joven, cuya lucha por la vida se convirtió en el símbolo del dolor y la impotencia frente a la violencia que golpea a la ciudad.